Hoy en día, la figura de un asesor jurídico resulta fundamental en la mayor parte de los aspectos financieros, contables y fiscales de un negocio. Y no solo por el hecho de ser el encargado de solucionar ciertos problemas, sino también por poder adelantarse a los mismos para evitar situaciones negativas en el ámbito legal.
Resumen del contenido
El asesor jurídico y los asuntos legales de la empresa
Precisamente, es en el entorno de la legalidad vigente donde cobra un principal protagonismo el asesor jurídico. Cualquier estrategia o iniciativa empresarial que quiera llevar a cabo una empresa o un autónomo ha de sustentarse en una serie de principios legales. El buen cumplimiento de los mismos es una de las principales tareas que tendrá a su cargo el asesor jurídico.
Sin embargo, este es tan solo uno de los numerosos pilares que el asesor jurídico ofrece a empresas y autónomos. Como su nombre indica, es el encargado de asesorar en los procesos de constitución, gestión y desarrollo de cualquier iniciativa o negocio. Una función que se antoja fundamental en los casos en los que el emprendedor sea todo un neófito en la materia.
Por otro lado, el asesor jurídico también puede estudiar y resolver todos los problemas legales relacionados con la empresa. Contratos, convenios, normas legales, facturación del autónomo, tipos de IVA, etc. son algunos de los temas en los que el asesor jurídico puede mostrar y ofrecer sus conocimientos en favor del negocio.
Asimismo, el asesor jurídico asesora en materia fiscal a cualquier empresa, preparando todo tipo de declaraciones y obligaciones fiscales y tributarias. En este sentido, resulta de gran ayuda para los autónomos que quieran iniciar su negocio. La fiscalidad en este ámbito siempre suele ser un tema tabú, siendo el asesor jurídico una de las figuras en las que apoyarse.
La figura del asesor jurídico para prevenir riesgos
Y es que actualmente vivimos muchos cambios en materia legislativa. Modificaciones que suceden y que nos pueden afectar o no. Para salir de dudas y facilitar nuestro trabajo, la figura del asesor jurídico se encargará de informarnos a este respecto. De esta manera, nos orientará en las acciones que debemos llevar a cabo de acuerdo al marco legal correspondiente.
Tal y como comentábamos al principio, el asesor jurídico será también el encargado de prevenir y evitar posibles hechos y situaciones que puedan acarrear problemas a la actividad laboral. Si solo se tiene en cuenta a esta figura cuando el problema está ya sobre la mesa, el coste de resolución será mucho mayor, hay que prevenir siempre, todo resulta mejor con un buen asesoramiento.
Constitución de la empresa, regulación de las relaciones entre los socios, empleados, proveedores, clientes, e instituciones públicas, registro y control de las obligaciones y fiscales y tributarias… Lo cierto es que la figura del asesor jurídico a todas luces más que importante.
Como se puede comprobar, contratar los servicios de un asesor jurídico repercutirá en beneficios para cualquier negocio. En la actualidad, no se entiende una empresa sin la presencia precisamente de un departamento de asesoría jurídica, encargado de coordinar y asesorar en materia legal y tributaria para cumplir en todo momento con la legalidad.
Una figura que se antoja imprescindible tanto para pequeñas como para medianas o grandes empresas. No hay que olvidar, en definitiva, que un buen asesoramiento jurídico garantiza la viabilidad del negocio.